¿Cuántas veces te has arrepentido de tomar una decisión en un determinado estado emocional? Probablemente te hayas dado cuenta de que eres más propenso a correr riesgos cuando te sientes feliz, mientras que la tristeza te provoca el efecto contrario.
Tomar decisiones cuando estamos enfadados no suele dar buenos resultados, ni tampoco si la decisión se toma en un estado de euforia.
¿Alguna vez te has dejado llevar por la primera impresión para decidir?, ¿eres consciente de hasta qué punto tus emociones son manipulables para ayudarte a tomar decisiones?
“El gran valor de saber cómo entregarnos es que todos y cada uno de los sentimientos se pueden dejar en cualquier momento y en cualquier lugar en un instante y pude hacerse continuamente y sin esfuerzo” – David R Hawkins
El afecto heurístico es un atajo mental que permite a las personas tomar decisiones y resolver problemas de forma rápida y eficiente. En este proceso influye la emoción (miedo, placer , sorpresa, etc.), es decir, la respuesta emocional afecta a la decisión, jugando un papel principal en la toma de decisiones.
Se trata de un proceso que funciona por debajo de la conciencia y que acorta el tiempo de toma de decisiones, permitiendo a las personas funcionar sin tener que realizar una búsqueda exhaustiva de la información. Esta forma de actuar se produce rápida y involuntariamente en respuesta a un estímulo, por lo que el proceso afecta al estado de ánimo durante un periodo corto de tiempo.
El afecto heurístico surge normalmente mientras juzgamos los riesgos y beneficios de algo, dependiendo de los sentimientos positivos o negativos que asociamos a un estimulo. Es el equivalente a actuar según el corazón.
En este vídeo se demuestra como el cambio emocional, condiciona el cambio de comportamiento, es decir, pasar de una emoción a otra, produce cambio de conducta ante una determinada situación.. La primera emoción que experimental los conductores es la ira , conducta (no asumo multa). Segunda emoción es compasión , conducta (asumo multa).
Los investigadores han encontrado que si tus sentimientos hacia algo son positivos, entonces es probable que juzgues minusvalores los riesgos y sobreestimes los beneficios, mientras que si sus sentimientos hacia una actividad son negativos será más propenso a sobreestimar los riesgos como altos y minusvalorar los beneficios.
La investigación ha demostrado que los riesgos y beneficios tienen una correlación negativa en la mente de las personas. Las investigaciones han revelado que las personas realizan sus juicios sobre una actividad o una tecnología no solo por lo que piensan al respecto, sino también por cómo se sienten al respecto.
Cuando estamos discutiendo con alguien y tenemos que tomar una decisión o emitir algún comentario delicado, se debe tomar la decisión mejor mañana. Muchas decisiones desacertadas se han tomado en pleno estallido emocional.
Los seres humanos estamos lejos de ser la máquina racional que algunos aspiran a ser. Lo queramos o no; nuestra mente está preparada y predispuesta para tomar las decisiones de manera rápida y utilizando solo una parte de la información. De hecho, muchas veces tomamos decisiones antes de darnos cuentas de que la hemos tomado y seguimos dándole vueltas y vueltas a algo que para nosotros ya tiene un destino: el que nosotros hemos elegido.
Uno de los objetivos que trabajamos en el centro, es el entrenamiento de la toma de conciencia de cambio de estado emocional, que condiciona a las personas con enfermedades neurológicas a aprender a gestionar o realizar conductas adecuadas a la persona utilizando como herramienta para desarrollar tal cambio de estado la Programación Neurolingüística.
Referencia: Articulo mente maravillosa “Como influyen los sentimientos en la toma de decisiones”
Vídeo: https://www.youtube.com/watch?v=-O4Hd4vFDuw
Debemos de saber lo qué hacemos antes de actuar. Para qué así todo nos salga de la mejor manera posible. Y los qué estén a nuestro alrededor nos tomen como un ejemplo a seguir.
Ser siempre positivos en todo lo qué realicemos para qué nos vaya bien.