Una investigación del Hospital Clínic y el programa de Neuroinmunología del IDIBAPS demuestra que la progresión de la enfermedad se refleja en la degeneración de los nervios de la vía visual. Un estudio realizado por investigadores del Idibaps-Hospital Clínic demuestra que es posible monitorizar la evolución de la esclerosis múltiple a través de la retina. Entre los firmantes del trabajo se hallan el Dr. Íñigo Gabilondo y el Dr. Pablo Villoslada. La investigación partía de la premisa de que la retina, al ser parte del cerebro, también se ve afectada por las enfermedades neurodegenerativas como la esclerosis múltiple, el alzheimer o el párkinson. Las técnicas láser de análisis por la imagen permiten alcanzar resoluciones de hasta 1.000 veces más pequeño que 1 milímetro, más que suficiente para analizar los nervios que asoman en el ojo por el nervio óptico y que miden una micra de diámetro. Incluso se está trabajando con técnicas de espectroscopia para obtener imágenes moleculares que permitirían identificar cambios en la composición de las neuronas antes de que aparezcan cambios morfológicos.
El estudio, publicado en Annals of Neurology, combina la tomografía de coherencia óptica y la resonancia magnética, y en él han participado cien pacientes con esclerosis múltiple, a los que se ha analizado en el momento de inclusión en el estudio y un año más tarde. La evolución de los datos obtenidos mediante técnicas de imagen se relacionó con la progresión clínica de los pacientes para demostrar que existe una degeneración de los nervios de la vía visual representativa de lo que ocurre en el cerebro. Además, la degeneración de los axones de las neuronas era independiente de los brotes sufridos por los pacientes, las fases inflamatorias agudas y más evidentes de la enfermedad pero que no tienen tanta importancia sobre su avance.
El siguiente paso es aplicar esta misma técnica a otras dolencias, como el párkinson o los trastornos del sueño REM, que son el síntoma más prematuro que se conoce de una enfermedad neurodegenerativa. El objetivo es monitorizar la enfermedad de forma no invasiva desde sus fases más tempranas, y obtener así información que permita predecir su evolución en los nuevos casos.
Fuente: www.jano.es