Primera sesión: orientación en las tres esferas

Un programa de rehabilitación para personas con alteraciones cognitivas implica la asunción de unos principios de funcionamiento cognitivo normal, que se interrelacionan con alteraciones cognitivas propias de una enfermedad neurológica. Sin un marco teórico de intervención cognitiva, los profesionales sanitarios pueden usar una metodología aleatoria similar a un libro de ejercicios, pero esta práctica sólo puede ayudar como “refuerzo” a la intervención debido a que nunca debe utilizarse como una práctica aislada porque se trataría de un tratamiento descontextualizado.

El marco teórico de rehabilitación cognitiva que se utiliza en CIEN reconoce la individualidad del usuario en el tratamiento y el énfasis se sitúa en conseguir que se conviertan en participantes activos del proceso rehabilitador, más que en un “recipiente” pasivo del tratamiento. Las funciones cognitivas superiores se desarrollan a través de la interacción social con otros y con la participación del nivel de funcionamiento potencial que cada persona posee. El foco de nuestra atención multidisciplinar va dirigido a la persona, no a la enfermedad. De este modo, los distintos profesionales del equipo neurorrehabilitador indicamos que, una vez finalizadas las sesiones semanales en el centro, el mejor contexto para seguir avanzando es llevar lo que se ha entrenado durante las sesiones al funcionamiento cotidiano. Este contexto ofrece muchas ventajas; familiaridad, aumento de la motivación y facilitación de la generalización entre otras.

Lo anterior, cobra más importancia en los casos en los que el centro se encuentra cerrado, bien por coincidir con un periodo vacacional o cuando se están realizando obras de adecuación en el mismo. A continuación, vamos a indicar los ejercicios que se encuentran enmarcados en el programa de rehabilitación cognitiva y que están dirigidos a las actividades y elementos de la vida cotidiana. Se trata de trabajar, en interacción con nuestros familiares y allegados, dominios cognitivos tan importantes como la orientación, memoria, atención, flexibilidad cognitiva y la resolución de problemas.

En primer lugar, debemos mantener una orientación diaria en las tres esferas. Esto de las tres esferas se refiere a estar orientado en tiempo (conocer qué día es de la semana y la fecha completa), en lugar (conocer dónde estoy en cada momento cuando salgo de casa) y en persona (conocer detalles de mi identidad y de aquellos que me rodean). Para mantener una buena orientación, es preciso instaurar rutinas y estrategias en el día a día.

En cuanto a orientación en el tiempo, las actividades a desarrollar serían; levantarse a una hora que no sea más tarde de las nueve-diez de la mañana, mirar la fecha en el calendario que tenemos en casa y poner en la televisión un programa de noticias donde aparezca la fecha y la hora (estilo informativo 24h). Esto permite obtener una conciencia del día completo (mañana, tarde y noche), conocer en qué día vivimos y tener información de las cosas que suceden en ese día.

A la mayoría de personas con enfermedad neurológica les cuesta instaurar esta rutina debido a que generan pensamientos que ponen el foco en la enfermedad más que en sus capacidades conservadas. Cuestionando esos pensamientos y con una actitud proactiva, se convertirá en una rutina satisfactoria al aprovechar gran parte del día, obtener conocimiento y por poder dialogar con los demás de las cosas que ha sucedido. Como complemento a la rutina de orientación descrita, es aconsejable estimar la hora que es, tanto por la mañana como por la tarde. Se trata de estar en una habitación donde no haya ningún reloj y realizar una predicción mental de la hora exacta que puede ser. Una vez hecha, ir a buscar un reloj y comprobar nuestra predicción. Si está cinco minutos arriba o abajo, será correcta. Es aconsejable hacer este ejercicio con otras personas (pareja, cuidador, hijos, nietos, etc.) porque es divertido y aumenta la motivación.

En cuanto a orientación en lugar, las actividades a realizar serían; aprovechar cualquier salida para ejercitar la orientación de lugar, proponiendo itinerarios alternativos a los que se suelen utilizar. Casi todo el mundo utilizamos los mismos recorridos para ir a comprar, ir a visitar a familiares, ir al médico, etc. Se trata de utilizar las salidas de casa para proponer un cambio en el itinerario, pero ese cambio debe ser con un recorrido de distancia parecido. Para ello primero hay que organizarlo mentalmente, después proponerlo y finalmente recorrerlo prestando atención a todos los detalles (tiendas, si es dirección prohibida para los coches, obras que pueda haber, etc.). Se trata de realizar cambios sutiles en los recorridos que normalmente realizamos. Si tu actitud es de comprobar tiempos y de conocer más detalles de tu ciudad, la experiencia será satisfactoria. Como complemento a este ejercicio, cada vez que vayas a un edificio, hospital o centro comercial, memoriza en qué planta estas en cada momento y como has llegado a ella y por donde (rampas mecánicas, ascensor, etc.).

En cuanto a orientación en persona, las actividades a realizar serían; de forma mental (sin utilizar papel y bolígrafo) repasa las distintas etapas de tu vida, comenzando por la etapa actual. Es importante que dediques un tiempo a pensar y organizar la información. El truco está en abrir la atención y repasar todos los detalles, los positivos y aquellos que no lo sean tanto, pero no te olvides de los positivos. Cuando lo tengas, se lo tienes que contar a otra persona que sea muy cercana a ti, diciéndole que estás haciendo un ejercicio de orientación personal y que te indique si se te ha olvidado algo. Como complemento, dedica un tiempo en pensar en tus familiares cercanos y recupera de la memoria sus nombres, los nombres de sus hijos, nietos, etc. Lo que no recuerdes pregúntalo y lo fijas en tu memoria para cuando hagas un repaso al día siguiente.

Te animo a que vayas realizando estos ejercicios sencillos y que adquieras las rutinas propuestas en el caso de que no las tengas adquiridas. No existe mejor satisfacción que hacer cosas por nosotros mismos en compañía de los que nos quieren. En el próximo “post” se indicarán ejercicios de memoria para realizar en casa y en las salidas que realices.

Departamento de psicología y neuropsicología del Centro Integral de Enfermedades Neurológicas de la Asociación Española de Esclerosis Múltiple de Albacete.

 

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