Cuidar en casa a una persona en situación de dependencia no es fácil, cambia la vida de todos aquellos familiares y amigos implicados en su vida. En función del nivel de dependencia se necesitan unos conocimientos y habilidades específicos y es fácil sentirse desbordado e impotente frente a esa situación. Aún así la familia sigue siendo la principal fuente de protección y ayuda para las personas dependientes.
Una de las patologías que pueden afectar a esta figura tan importante de personas dependientes es el Síndrome del Cuidador.
El Síndrome del Cuidador refiere a aquellas personas que sufren el desgaste físico, psicológico y de su salud en general en el cuidado constante y continuado del enfermo (puede ser por cualquier enfermedad, usualmente crónica, mental, dentro del colectivo de enfermedades neurológicas que trabajamos podría ser esclerosis múltiple, demencia vascular, ICTUS, ETC…). La enfermedad no sólo se interpone en la vida del afectado, sino que también es un mal con unas consecuencias psicológicas devastadoras para todos aquellos que le rodean y cuidan de él. El malestar psicológico puede derivar en otros de tipo físicos o agravar ese estado psicológico hasta el punto que la persona puede llegar a caer en depresión. Por eso se considera una premisa fundamental el darle todo el apoyo a aquella o aquellas personas encargadas al cuidado del enfermo.
La persona que “cuida” a otra puede desarrollar episodios de estrés de variable intensidad. Se trata de un trastorno con unas implicaciones graves tanto a nivel físico como psicológico. Este es un síndrome poco conocido, también llamado “fatiga de compasión”, que afecta cada vez a más trabajadores del mundo sanitario, así como familiares.
El perfil general para desarrollar tal síndrome serían:
- Suele ser la persona que se responsabiliza de forma única la mayoría de las veces del familiar dependiente.
- Se tienen sentimientos como cansancio, desesperanza, depresión y muchas veces sentimientos ambivalentes como rabia, hostilidad encubierta hacia el enfermo, y a la vez, sentimientos de culpa por generarse este tipo de emociones negativas.
- Suele desconectarse de totalmente de sus propias necesidades para entrar en una rueda de codependencia en el que solo puede vivir si uno se siente necesario para los demás.
- La intensidad del síndrome varía según los apoyos familiares, sociales y el aislamiento. Las ayudas que otros miembros de la familia puedan dar serán imprescindibles para ayudar a la persona que padece el síndrome del cuidador, una persona que vive para cuidar de los demás pero no es capaz de cuidarse a sí misma.
- Por lo general, son los hijos del paciente limitado, y por lo general mujeres las afectadas por este síndrome
El síndrome se caracteriza por el agotamiento físico y psíquico. La persona tiene que afrontar de repente una situación nueva para la que no está preparada y que consume todo su tiempo y energía. Se considera producido por el estrés continuado en una lucha diaria contra la enfermedad y que puede agotar las reservas físicas y mentales del cuidador. Se presenta especialmente en quienes tienen que someterse a cuidar de adultos mayores con algún grado de alteración o deficiencias de orden neurológico o psiquiátrico etc..
Los síntomas que pueden aparecer pueden ser trastornos del sueño, irritabilidad ansiedad, desesperación, resentimiento, cansancio, perdida de interés por aspectos sociales, aislamiento social , problemas de concentración y corren riesgo de sufrir mayor incidencia de problemas orgánicos y fisiológicos, patologías cardiovasculares, trastornos gastrointestinales, alteraciones del sistema inmunológico, problemas respiratorios etc, así como, síntomas psicológicos :depresión, ansiedad, estrés, hipocondría, problemas psicosomáticos ,dolor de cabeza, pérdida de apetito, temblor, problemas gástricos, palpitaciones, vértigo, insomnio, problemas de memoria y concentración, problemas emocionales como tristeza, preocupación, soledad, irritabilidad, culpabilidad etc..
No obstante, aun padeciendo estos trastornos, no suelen acudir a consultas médicas. Así mismo realizan menos “conductas de cuidado de la propia salud”, como no dormir lo suficiente, alimentarse de forma inadecuada, no vacunarse, no realizar ejercicio físico, abusar del tabaco o alcohol, consumir en exceso ansiolíticos e hipnóticos, incumplir los tratamientos médicos, etc.
Pero como conclusión los síntomas psicológicos, la salud mental de los cuidadores, suelen verse más afectada que la salud física, La intervención psicológica que se realiza desde nuestro departamento es la cognitivo conductual, es decir, se centraliza en la modificación de los aspectos cognitivos (pensamientos y emociones mal interpretados y gestionados) que son la causa prioritario para la modificación de determinadas conductas.
Departamento de Psicología y Neuropsicología del Centro Integral de Enfermedades Neurológicas del Centro de Esclerosis Múltiple
Bibliografía:
Presentación realizada por Gerardo Viau, 16/9/2014
CONSULTAS ELECTRÓNICAS : ! (http://search.yahoo.com/search?fr=chrgreentree_sf&ei=utf-8&ilc=12&type=748931&p=s%C3%ADndrome%20del%20cuidador) ! (http://psicologoadistancia.com/wp/articulospsicologicosoriginales/el-sindrome-delcuidador/) ! (http://es.wikipedia.org/wiki/Herbert_Freudenberger) ! (http://www.siquia.com/2013/06/el-sindrome-del-cuidador-el-estres-de-ladependencia/) ! (http://www.slideshare.net/jairoandrescastropenaloza/carga-del-cuidador), !
BIBLIOGRAFIA: Revista colombiana de psiquiatría volumen XXXVI “Síndrome de carga del cuidador”. ! (http://psicologoadistancia.com/wp/articulospsicologicosoriginales/el-sindrome-delcuidador/)