Cuando se piensa en la identidad se pone el foco en aquellas características o circunstancias más positivas, pero… ¿qué sucede con la identidad cuando sobreviene una enfermedad neurológica?
En la mayoría de los casos se produce una desconexión entre el yo-antes y el yo-después, más si cabe cuando la enfermedad afecta al aspecto o la funcionalidad de la persona. Esta discontinuidad ha sido estudiada a través de los cambios que tienen lugar en el autoconcepto (pensamientos y sentimientos que una persona tiene en relación a la definición de sí mismo), así como desde las denominadas aproximaciones narrativas (historias que una persona construye sobre sí mismo, en relación con otros y la sociedad, para integrar eventos vitales y generar un sentido de unidad y propósito). Diversos autores profundizan en esta cuestión tomando como referencia la teoría de la discrepancia del yo donde se establece que el estado emocional de las personas está vinculado al nivel de congruencia entre el yo-actual (cualidades que uno cree que posee), el yo-ideal (cualidades que uno desea, pero no posee) y el yo-anhelado (cualidades que uno cree que debería poseer). Así, la discrepancia del yo se produce cuando la evaluación del yo-actual difiere del yo-ideal o del yo-anhelado.
En el departamento de psicología-neuropsicología se abordan intervenciones terapéuticas para la reconstrucción y reorganización de la identidad mediante componentes de la terapia simbólico-experiencial, de la terapia de aceptación-compromiso o de las intervenciones narrativas.
Considerar la rehabilitación neuropsicológica y la rehabilitación cognitiva sinónimas e intercambiables empobrece la asistencia y el tratamiento que se puede ofrecer. En el centro CIEN la rehabilitación neuropsicológica persigue compensar o reducir déficits cognitivos, así como reconstruir y reestructurar la identidad socavada por la enfermedad neurológica.
Departamento de psicología y neuropsicología del Centro Integral de Enfermedades Neurológicas de la Asociación de Esclerosis Múltiple.